Espacio dedicado a mi Música (un poco largo ^^' )

Es muy sencillo, al Valhalla sólo llegan los valientes guerreros caídos en combate. En multitud de contiendas han demostrado sus cualidades derrochando bravura, coraje y sentido de lealtad. Amon Amarth podrían aplicar estos términos a su carrera. Hace más de diez años que se dieron a conocer y sus convicciones no han cambiado. Saben lo que quieren y lo ejecutan. Esto no significa que practiquen el inmovilismo, todo lo contrario. A lo largo de su década de vida han evolucionado sus patrones estilísticos concediendo más espacio a la melodías dentro de ese personalísimo viking death metal que les distingue del resto.

“Fate of Norns” es un paso adelante más. Quieren continuar deleitando a su cada vez mayor legión de seguidores a lo largo del globo. En Estados Unidos gozan de cierta popularidad (en un nivel “underground”, se entiende), como casi todas las bandas suecas que se han decidido a “hacer las Américas”.

Johan Hegg es un tipo que impresiona. Cualquiera afirmaría que es descendiente directo de algún caudillo vikingo del siglo X. Uno se lo imagina más como héroe de gesta de las Sagas de Snorri Sturluson que en su papel de metalero de los nuevos tiempos. Aunque su aspecto feroz denote lo contrario, el vocalista de Amon Amarth es un hombre amable y comunicativo. Esto fue lo que nos comentó.

CYPT: Hola Johan, para empezar, ¿consideraras que cuando algo funciona, no debe ser cambiado en exceso?

JOHAN HEGG: Yo creo que sí. Supongo que te refieres a nuestra música. Creo sinceramente que hemos ido incrementado nuestra calidad y nuestra personalidad hasta lograr el sonido que buscábamos. Estamos satisfecho con ello y no veo el motivo por el que Amon Amarth deban cambiar. Evolución, sí; cambio ilógico, no.

Parece que habéis querido ahondar más en las melodías y la intensidad que en los pasajes rápidos.

Es algo que ya hicimos en “Vs. the world”. Quizá este género demande más ese tipo de canciones. Desde nuestros inicios las melodías siempre han sido esenciales pero antes las combinábamos de otra manera. En los dos últimos discos, ese papel más ahogado ha ido abriéndose pasa hasta llegar a lo que somos. Por otra parte, no queríamos perder la agresividad del death metal por lo que necesitábamos imprimir más dosis de intensidad, buscar el aspecto pesado de nuestras canciones.

Probablemente interpretando temas a medio tiempo el oyente puede percibir mejor el lado épico de la banda.

Exacto. Antes notaban más la parte death metal, la agresividad, ahora creo que hemos llegado a un equilibrio, épica, intensidad, melodía, brutalidad,...

Creo no equivocarme, pero jamás he leído una mala reseña acerca de un disco de Amon Amarth. Sois de los pocos grupos que consigue unanimidad entre los medios. ¿Leer estas buenas críticas os supone una presión añadido o una motivación?

Creo que ni lo uno ni lo otro. Cualquier grupo que diga que no le interesa la prensa creo que miente. Una cosa es que o te afecte pero siempre es agradable que digan cosas buenas sobre ti. Eso repercute en que la gente se interesa por ti. Es cierto que nosotros solemos tener buenos comentarios pero recuerdo uno o dos que no. No obstante, me resulta bastante indiferente cuando Metal Blade nos envía un dossier con comentarios acerca del grupo.

¿Y se ve reflejado en las ventas?

¿Los buenos comentarios?. No sé, yo creo que más que eso influye la labor que hemos venido desarrollando Amon Amarth a lo largo de estos últimos años girando sin parar. Sinceramente, creo que ahí está la razón del aumento de las ventas. El público se siente más familiarizado con tu propuesta si te ve en directo. Pienso que una canción en vivo tiene más impacto que 100 reseñas positivas.

Entonces, ¿por qué hacéis tantas entrevistas cuando promocionáis un álbum?

Hombre, quizá he exagerado un poquito al decirlo. No te voy a decir que las entrevistas es una parte estupenda pero comprendo que es parte de nuestra labor de músicos. Una entrevista bien encauzada sí que puede resultar interesante para el lector. No hace falta que sea un promocional continuo de tu disco sino un equilibrio entre hablar del disco, la música y aspectos relacionados con el entorno de un grupo.

Has comentado que la clave del crecimiento de Amon Amarth está en las giras, en concreto, para presentar “Vs. the world”, viajasteis tres veces a América y dos en Europa. ¿No es muy cansado?

Sí, aunque en realidad, al final se quedaron en dos y tres, respectivamente, más algunas apariciones en festivales. Girar siempre es duro, en especial por Estados Unidos donde las condiciones no son las mejores y las distancias muy largas. En Europa, salvo si bajas a España, Portugal o Grecia, no tienes que hacer demasiados kilómetros entre actuación y actuación. Es cansado porque vivir entre un autobús y una sala no es que sea muy sano pero nos gusta lo que hacemos.

Volviendo al disco, me gustaría preguntarte por un tema en concreto, “Arson”, quizá la más lenta de vuestra trayectoria.

“Arson” es una composición que está muy conectada a otra de nuestro primer disco, “Once sent from the golden hall”, que se llamaba precisamente “Amon Amarth”. La diferencia es que “Arson” ahonda más en el plano melancólico, el concepto de la canción así lo demandaba.

Una curiosidad, al ser un tema lento, ¿os planteasteis utilizar voces normales?

Pues sí, lo estuvimos meditando sobre si convenía o no. Me dejaron a mí tomar la decisión al respecto y les comenté que yo no era la persona indicada para hacer voces melódicas, que si las metíamos debía ser un invitado. Entonces decidimos que no. Pienso que Amon Amarth y Johan Hegg en particular tenemos una personalidad adquirida a lo largo de los años. No estoy en contra de las voces melódicas, me gustan porque me gusta el heavy clásico mas considero que en Amon Amarth quedarían fuera de contexto. Puntualmente se podrían utilizar pero hasta ahora no se ha dado el caso.

Siendo tú el principal escritor del grupo, me gustaría comentar que vuestras letras no son las típicas de los conjuntos denominados viking metal. Parece que intentáis huir de los siempre recurrentes dioses como Odin, Thor o Baldir.

No es que lo intentemos ya que, de hecho, en muchas de nuestras canciones esos nombres aparecen. Lo que pasa es que nosotros queremos resaltar que la civilización vikinga no se centra únicamente en la religión y en todas las historias relacionadas. Existe una opinión común sobre esto y los vikingos fueron mucho más. Fue una sociedad organizada de exploradores, de comerciantes, gente que desarrollaron una cultura y que, como cualquier otro, tenían su vida cotidiana. Todo eso es lo quieren reflejar nuestras letras, una realidad global.

Incluso, una canción como “Fate of Norns” es más un tema melancólico, un canto desesperado.

Es que esa letra en concreto es muy especial. La escribí como consecuencia de una ruptura sentimental y tiene un significado personal, profundo, difiere un poco de las demás canciones del disco.

A lo largo de los años, no sólo los escandinavos han cantado sobre la época de los vikingos, también grupos americanos, italianos y hasta españoles. Entiendo que, puntualmente, se pueda hacer, pero de un modo recurrente lo considero ridículo. Es como si a un sueco le diera por cantar sobre las corridas de toros. ¿Cuál es tu opinión al respecto?

Es un asunto complicado. Por una parte, yo no soy nadie para decir que es lo que tiene que tratar en sus temas un grupo. Cada uno es libre de hacer lo que le dé la gana. Eso no quita para que yo tengo mi opinión personal pero tampoco me apetecería crear controversia con ella. Yo, desde luego, no lo haría pero no profundizaré demasiado por respeto a esos grupos.

Aun siendo escandinavos, sinceramente no creo que haya demasiadas bandas que traten el tema de los vikingos con el rigor que merece. Únicamente, para mí, Bathory, Enslaved y vosotros. Por cierto, ¿te ha afectado de alguna manera la reciente muerte de Quorthon, el alma de Bathory? ¿Le conocías?

Personalmente, no le conocía. Jamás tuve la ocasión de que me lo presentaran aunque vivíamos prácticamente en la misma ciudad. En el plano musical, es indudable que Bathory es un grupo mítico. No creo que la música de Amon Amarth se viera influida por Bathory pero sí que me considero seguidor de sus primeras obras, en especial “Blood, fire and death”, uno de mis discos favoritos. En ese sentido, sí que su muerte es una gran pérdida.

¿Existe alguna razón especial para titular el disco “The fate of Norns”?

No. Es más el hecho de que era una canción significativa del álbum y nos gustaba a todos el nombre. No existe un concepto por detrás de ello aunque sí puede existir un vínculo temático entre las canciones.

¿Consideras que el destino de las personas está predeterminado, tal vez por las Nornas (diosas del destino en la mitología nórdica)?

No sé qué responderte. Todo son convicciones personales. Cada ser humano tiene un camino a recorrer y es difícil salirse del mismo. Puedes desviarte del sendero más directo, explorar otras sendas pero el punto de destino siempre estará ahí, te acompañará hasta que lo alcances. No es tan fácil alterar lo designios marcados.

Cuando apareció “Vs. the world” charlé con vuestro batería, Fredik Andersson, y me comentó cómo en tu país, Suecia, las autoridades parecen renegar de la época vikinga. Yo pude comprobarlo cuando visité Estocolmo. Allí tenéis el museo folclórico llamado Skansen, el Museo Vasa (un barco que se hundió minutos después de su botadura), o el Museo Nórdico, en el cual, paradójicamente, existen más salas dedicadas a la fiesta de Santa Lucía que a hablar de los vikingos. Me parece un poco vergonzoso.

Sí, pero es siempre lo mismo. Debido a ciertas conexiones absurdas, en el conjunto de Escandinavia se tiene la idea de que todo lo relativo al interés por los vikingos está relacionado con la extrema derecha. A nosotros mismos nos ha costado desembarazarnos de este estigma. No somos culpables de que un loco como Hitler se interesara por la mitología nórdica. A mí me interesan las historias vikingas del siglo VIII, del IX o del X. Lo demás, es absurdo. Es una especie de miedo que existe en Suecia a hablar de esto. Por eso está tan ninguneado pero las cosas están cambiando en los últimos años.

Que haya gente “normal” interesada supondrá un avanza, sin duda.

Mira, yo empecé a interesarme por los vikingos en el colegio. Tenía un profesor de historia sueca que nos habló de toda la historia sueca no sólo de la que se nos quería enseñar en los libros. Los vikingos no eran unos seres abominables, eran unos individuos como los demás de la Edad Media, que luchaba por sobrevivir. Es más, en muchos aspectos, la cultura vikinga tenía unos códigos de honor y respecto bastante más avanzados que la cristiana.

Además de los vikingos, ¿te interesan otros aspectos de la historia sueca como la Unión de Kalmar, Gustav Vasa o la llegada de la dinastía Bernadotte?

Sí, me gusta leer libros de historia aunque no tengo demasiado tiempo. Son muy enriquecedores y comprendes distintos hechos que sucedieron en el país.

Volviendo a Amon Amarth, habéis tocado en algún festival este verano como el Rock the Nations en Turquía o el Wacken. ¿Presentasteis algún tema nuevo?

Sólo uno porque tampoco nos apetecía abrumar a la gente con canciones desconocidas. Interpretamos “Valkyrias ride” y la reacción fue buena aunque, claro, nos estaban viendo nuestros seguidores, es normal que les gustase.

En octubre comienza vuestra gira europea que parece centrado en Alemania y alrededores.

Es un asunto más de la agencia de contratación, nosotros pocos tenemos que ver en ello y te aseguro que a Amon Amarth nos gustaría ir por todos los países. Cuando tocamos en España nos sentimos muy cómodos, disfrutamos mucho con la gente.

La última vez, en el Piorno Rock, fue tremendo.

Sí, sí, hacía mucho frío.

Y tanto, pero fue alucinante. Pasadas las 12 de la noche con una tempatura de 0º, el público con abrigos y bufandas y tres de vosotros ¡sin camiseta!. Quizá era un día caluroso para cinco locos venidos del norte de Europa.

(risas) Sí, lo recuerdo. La verdad es que hacía frío antes de salir a tocar pero encima de un escenario te olvidas de todo, se crea un microclima especial.

¿Qué tal fue la experiencia de tocar en Islandia?

Fue genial, no demasiadas bandas tocan allí por lo que la gente se vuelca con los grupos. Islandia es un país diferente. A pesar de estar tan al norte, el frío es menor que en Suecia. Creo que el ser una isla le ayuda. Los promotores se portaron muy bien con nosotros. Tocamos dos días en Reykjavik y nos lo pasamos de maravilla. El primer día fue en un sitio para 150 o 200 personas abarrotado y con un calor infernal...

Paradojas de la vida. Os asáis de calor en Islandia y os congeláis en Andalucía.

(risas) Es verdad, tío. ¡Qué cosas pasan!. Es lo nunca visto.

Lo que es una pena es la cancelación de la gira escandinava con Cannibal Corpse.

Pues sí porque había doce conciertos programados entre Noruega, Suecia, Finlandia y Dinamarca. Además, Cannibal Corpse tienen un gran seguimiento aquí y era una oportunidad excelente pero la carga financiera que debíamos afrontar era excesiva y nuestra compañía no estaba dispuesta a asumirla. Por ese motivo nos vimos forzados a la suspensión.

Por cierto, no demasiadas bandas se acercar a Israel a tocar. Vosotros estuvisteis hace un año.

Para mí, es uno de los mejores shows que hemos hecho nunca. Fuimos a Tel Aviv y tocamos ante más de 1000 personas completamente locas. Es más, llegó un momento en que temí por la gente, pensé que iba a pasar algo grave. Afortunadamente no fue así.

¿Tuvisteis medidas especiales por la situación del país?

Únicamente en el aeropuerto y cuando fuimos a hacer un poco de turismo, vimos muchísima policía. El resto, completamente normal.

No es una pregunta muy políticamente correcta y quizá te ponga en un aprieto pero ¿qué te parecen todos los “beeps” e interrupciones que hay en la copia promocional?

Es un mal necesario. No me gusta pero tampoco me agrada que el disco del grupo esté en Internet un mes antes de ser editado. Es un problema de concienciación al que le veo difícil solución. Es una pesadez escuchar el disco así pero es lo que hay.

El batería del grupo, Fredik, está metido en un par de proyectos paralelos como Laid To Unrest o Curriculum Mortis. ¿Alguno más en la banda tiene trabajo extra en la música?

No, solamente es Fredik. Los demás, bastante tenemos con Amon Amarth. A mí, personalmente, me ocupa todo mi tiempo con la labor de promoción, los conciertos, etc.

Una pregunta final. Considero que Amon Amarth es una de las pocas bandas de metal extremo que pueden resultar atractivas para el público más clásico del heavy. ¿Crees que con “The fate of Norns” podréis traspasar esa barrera?

Yo creo que con “Vs. the world” ya hicimos un gran trabajo en ese aspecto. Muchos seguidores del heavy se acercaron a nuestros conciertos. En los festivales que tocamos, observo entre el público que nos ve, camisetas de Iron Maiden, Judas, Helloween, etc. Pienso que “The fate of Norns” debería servirnos para expandir aún más nuestro campo de seguidores.

¿Qué harás, entonces, cuando te veas en las listas de éxitos junto a Beyonce o Eminem?

(más risas) No creo que eso suceda. El mundo no está preparado para un cambio de ese estilo.

¿Quién sabe? Tal vez un día llegará.

escrito por Marco Antonio Romero